Himno
La tierna voz del Salvador
nos habla conmovida,
Oíd al médico de amor
quien da a los muertos vida.
Coro:
Nunca los hombres cantarán,
nunca los ángeles de luz,
Más dulce nota elevarán
que el nombre de Jesús.
“Borradas ya tus culpas son”,
su voz hoy te pregona,
Recibe, sí, su bendición
y goza la corona.
La negra copa del dolor,
Jesús has apurado,
Por dar al pobre pecador
tu amor, oh bien amado.
Y cuando venga el Salvador,
al cielo subiremos,
Arrebatados en amor,
su nombre cantaremos.