Himno
Maravilla de clemencia,
prueba de infinita gracia,
compasivo amor que sacia,
contemplamos en Jesús;
Por nosotros pecadores
Él de rico pobre se hizo.
La justicia satisfizo
por nosotros al morir.
Grande fue el amor que tuvo
a las almas tan perdidas,
del pecado ennegrecidas;
con su sangre las limpió.
Gloria a Dios en las alturas
que a los hombres paz ha dado,
y al que tenga más pecado
y confiese, da perdón.