Himno
De mil maneras procuré
calmar temor, mas vano fue;
La Biblia ahora aceptaré,
y creeré en Cristo.
Tinieblas, muerte y maldición
Me tienen de alma y corazón;
mas luz y vida y bendición
encontraré en Cristo.
Murió y ya vive a mi favor;
en hecho y dicho es siempre amor;
y para el pobre pecador
ninguno hay cual Cristo.
Aunque otros búrlense de mí,
iré, Señor Jesús, a ti
con lo que he hecho y lo que fui,
pues eres Tú el Cristo.